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Memoria de un instante. 20 años del Premio de Fotografía

La convocatoria de un Premio de Fotografía por parte de Caja España-Caja Duero surgió en el año 1991 con el deseo de promocionar la creación de imágenes basadas en la misteriosa transmutación que se produce en la oscuridad pero que se genera en la luz. El arte de la fotografía, cada vez más valorado y presente en nuestra cultura audiovisual, nos muestra el afán de búsqueda de una estática estética y temporal por parte del artista. El retrato, en sus múltiples versiones, de personas y de objetos, psicológico o plástico, en blanco y negro o en color, se convierte en un continuo estímulo para ese aventurero de la imagen que es el ser humano abducido por y para la fotografía. En esta puntual divagación descansan los presupuestos teóricos de unas motivaciones que, con esta variada muestra, no persiguen nada más, ni nada menos, que ofrecer al potencial espectador la ingente y variada carga icónica que fluye a través de un mundo globalizado y multiforme.

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