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Minutos antes de que comenzara la actuación ya había cientos de personas que esperaban la actuación de Miss Caffeina. El concierto no defraudó. La puesta en escena con un fuerte componente estético y una selección de temas muy acertado fraguaron una de las mejores actuaciones de la primera noche del Sonorama- Ribera 2011.

La aparición en el escenario Ribera de Alberto Jiménez, vocalista del grupo, se secundó con gritos y ovaciones que auguraban la buena conexión entre cantante y público que se dio durante toda la noche. Tras la buena interpretación de "N=3", vino la sorpresa: los componentes de Miss Caffeina hicieron un dueto con la ubetense Zahara, junto a la que interpretaron "Qué sabe nadie", de Raphael.

La tensión estaba en el aire, y ellos supieron mantenerla hasta el final del concierto. Alberto Jiménez, que llevaba un curioso maquillaje en su ojo, se encargó de mantener a la gente bailando pidiendo palmas constantemente, desgarrando la voz en momentos claves y dando mucho espectáculo sobre el escenario con poses y numeritos muy peliculeros.

Para terminar el show, que duró un poco menos de una hora, escogieron una traca final de temas que dejó exhausto al público. Con "Respirar" consiguieron la melancolía perfecta, que luego rompieron con los ritmos potentes de "Mi rutina preferida" y "Cabaret". Tras esto se marcharon, muchos esperaron un bis, pero la continuidad del festival lo impidió. Otro acierto. Siempre es mejor quedarse con ganas de más, que hartarse.